MIDE:
El MIDE es un sistema de comunicación entre excursionistas para valorar y expresar las exigencias técnicas y físicas de los recorridos. Su objetivo es unificar las apreciaciones sobre la dificultad de las excursiones para permitir a cada practicante una mejor elección. Su uso es libre para el informador y sólo complementa, de una forma unificada, las descripciones, valoraciones y recomendaciones que cada autor considere oportunas. El uso es libre también para el informado que sabe que la naturaleza es más compleja que lo que un sistema de información puede valorar. El MIDE ha sido concebido como una herramienta para la prevención de accidentes en excursiones por el medio natural. El método permite clasificar en libros, guías, topoguías, oficinas de turismo… los recorridos, para que cada persona elija conforme a sus capacidades y gustos.
El MIDE expresa el conjunto de dificultades técnicas y físicas de un recorrido. Se ha hecho necesaria la unificación de criterios para que los excursionistas puedan hacerse una idea mucho más cercana de la realidad.
El Método de Información De Excursiones está compuesto por dos bloques de información:
Valoración de cuatro aspectos de dificultad distintos: severidad del medio natural, orientación en el itinerario, dificultad en el desplazamiento y cantidad de esfuerzo necesario. Estas valoraciones, de 1 a 5 puntos y de menos a más, se elaboran en base a diferentes conceptos que se interpretan en la tabla de la parte inferior.
Información básica sobre cada ruta: horario, desnivel positivo acumulado, desnivel negativo acumulado, distancia horizontal recorrida, y tipo de recorrido.
MIDE es una herramienta destinada a los excursionistas, para que puedan escoger el itinerario que mejor se adapte a su preparación y motivación. De este modo el Método de Información De Excursiones es no sólo un método de información sino también una herramienta de prevención de accidentes para el senderista, ya que a más información mayor seguridad.
Antecedentes:
La evolución de la práctica deportiva a evolucionado mucho en los últimos 40 años. Así podemos dividir nuestra historia en cuatro grandes periodos:
Exploradores: allá por el final de los años sesenta del siglo pasado comenzó la época de exploración, que continúa en nuestros días. En esta época la única práctica deportiva que existía era la propia de los exploradores, franceses, británicos, cántabros, madrileños, catalanes, valencianos, vascos etc.
Simulacro Esocan 2016 La Gandara
Deportiva: a principios de la década de los años noventa del pasado siglo se generaliza la práctica deportiva en sentido puro. La publicación de las Grandes Travesías facilita esta modalidad consistente en la colección de travesías. Se trata de una forma de practicar este deporte sin grandes necesidades estructurales (clubes, materiales, trabajo en equipo etc). Dos deportistas con dos cuerdas de 50 m. pueden realizar grandes actividades sin necesidad de encuadrarse en una estructura superior.
Empresas: a principios de siglo con la aparición de la Red de Cuevas del Alto Asón comienzan a disfrutar de nuestras cavidades otras personas ajenas por completo al ámbito deportivo, de la mano de servicios profesionales de guiado en cueva. La administración deja de tener un ùnico interlocutor en materia de uso y gestion de las cavidades: la Federación Cántabra de Espeleología. Entrando en juego ACANTA, la asociación de empresas de turismo activo de Cantabria.
Cueva Coventosa. Red de Cuevas del Alto Ason.
Excursionistas: de un tiempo a esta parte venimos detectando la presencia en nuestras cavidades de “deportistas” que sin un equipamiento muy ortodoxo se acercan a aquellas cavidades que presentan una aproximación cómoda, y que tienen un cierto valor paisajístico y de aventura asequible. Era cuestión de tiempo que se produjera un incidente de la naturaleza que en este artículo se narra…… y han venido para quedarse. Sin duda en el futuro tendremos cada vez más incidencia de este tipo de rescates: situaciones banales, cerca a la boca de entrada y personas con poca preparación técnica, planificación escasa y forma física discutible…. Ha comenzado una nueva era en la espeleología.
MIDE espeleo:
Nuestra idea es aprovechar la experiencia seguida por la FEDME y aplicar un método similar al mundo de la espeleo: (http://www.montanasegura.com/historia-del-mide/)
¿Cómo se desarrolló el MIDE?
Metodología seguida para la definición del método MIDE:
1.- Definición de los factores a contemplar:
Los montañeros a la hora de depurar un método como el planteado anteriormente contaron con la opinión de 12 expertos de reconocida experiencia que determinaron los factores que debería tener en cuenta para clasificar las excursiones. Así los aspectos que se deberían valorar fueron los siguientes:
- Severidad del medio natural.
- Dificultad de orientación.
- Dificultad en el desplazamiento.
- Esfuerzo requerido.
2.- Redacción del manual de procedimientos del MIDE.
Como se ha indicado más arriba el MIDE da dos tipos de información, una información objetiva, llamada información de referencia. Y una información subjetiva ordenada en los factores contemplados.
Cada factor se valora de 1 a 5 en función de una serie de criterios a seguir para la graduación. Estos criterios son los que los expertos han considerados como relevantes para la valoración de los factores correspondientes.
3.- Validación del método:
Para la validación del método se eligieron una serie de itinerarios conocidos de distinta dificultad que fueron valoradas de dos maneras diferentes por dos grupos de expertos distintos. Unos ordenaron de mayor a menor dificultad las excursiones que conocían en cada uno de los aspectos MIDE, los otros utilizaron una primera versión del manual de procedimientos del MIDE. Se compararon las ordenaciones obtenidas y por ajustes sucesivos utilizando los paneles de expertos, se validó el citado manual con las modificaciones pertinentes.
Para determinar los aspectos de dificultad que debía considerar el método, se contó en un inicio con la opinión de 12 expertos, de siete provincias del territorio español: personas con reconocida experiencia en la programación de actividades de clubes y federaciones, guías profesionales, educadores ambientales, empresarios de turismo deportivo, autores de publicaciones de montaña y topoguías, especialistas en responsabilidad civil, y tres miembros de la junta de la FEDME. Todos ellos montañeros.
Con sus aportaciones ayudaron a determinar qué factores debería tener en cuenta un método para clasificar excursiones. Un grupo de trabajo compuesto por responsables de equipo de Montañas para Vivirlas Seguro respondió al mismo guión de la entrevista a expertos.
Una vez determinados los aspectos que se deberían valorar (severidad del medio natural, dificultad de orientación para elegir y mantenerse en el itinerario, dificultad en el desplazamiento según el tipo de camino, y esfuerzo requerido para realizar la excursión), se procedió a hacer una validación del método.
Para ello se seleccionaron 58 excursiones de distinta dificultad, duración y tipo de terreno (todas dentro del territorio aragonés), que posteriormente fueron valoradas de dos maneras diferentes por dos grupos de expertos distintos. Unos ordenaron de mayor a menor la dificultad de las excursiones que conocían en cada uno de los aspectos del MIDE, los otros utilizaron una primera versión del manual de procedimientos del MIDE para valorarlas con el método.
Se compararon las ordenaciones obtenidas con los dos sistemas y, si bien no se diferenciaban en mucho, sí se consideró hacer alguna modificación al método, obteniéndose al final de este proceso la primera versión del manual de procedimientos.
Las excursiones por montaña frente a las excursiones espeleológicas tienen algunas diferencias claras. No voy a entrar en ellas pues en la mayoría de los casos son obvias. Sin embargo la metodología seguida para el desarrollo del MIDE es sin duda de gran interés para el mundo de la espeleo. El MIDE no es de aplicación automática por desarrollarse la actividad en medios diferentes, aun con elementos comunes, sin embargo la metodología de definición del propio método si es muy interesante. Por un lado diferencia entre datos objetivos medibles y verificables, de datos subjetivos. Por otra parte analiza las excursiones y define unos factores que han de ser valorados, y determina los criterios de valoración. Finalmente y siguiendo la técnica de paneles de expertos ajusta una valoración de consenso de los mismos, lo que permite reducir la carga subjetiva a la valoración.
Rutas a valorar:
En Cantabria están documentadas más de 9.000 cavidades, sin embargo los espeleólogos deportivos (excursionistas) solo vistan unas pocas. Algunas de estas cuevas presentan diferentes rutas o excursiones, esto es debido a que las más demandadas se encuentran en el interior de los mayores sistemas subterráneos de España, con más de 30 km. De desarrollo, en algunos casos (4) con más de 100 km. Es preciso pues conocer que rutas son las más demandadas para proceder a su valoración e información.
TODOS AQUELLOS INTERESADOS EN PARTICIPAR EN ESTE PROYECTO PUEDEN PONERSE EN CONTACTO CON martin@espeleosocorro.es
Estamos buscando coordinador del proyecto, si te interesa…… ánimo.